Coquetear por deporte,
por mero juego.
Bajar un par de estrellas para las niñas ciegas,
decirle poemas a las aves que migran,
pintar murales sin color ni forma,
coquetear simplemente por aburrimiento,
por intento,
por necesidad,
por naturaleza,
coquetear porque para eso se ha hecho el hombre,
para regar semillas de amor por el mundo
y que den flores de solo una noche.
No coquetear por sexo nunca,
solo fluir como una hoja...